Los green roofs, o cubiertas verdes, son una innovadora técnica de diseño y construcción sostenible en la cual se coloca vegetación, plantas y sistemas de cultivo en la parte superior de edificios o estructuras. Estas cubiertas no sólo ofrecen beneficios estéticos, sino que también contribuyen de manera significativa a la mejora del medio ambiente urbano y la mitigación de los efectos negativos del cambio climático. En Finques Chicote te explicamos las características principales de esta técnica.
Hay dos categorías principales de las llamadas cubiertas verdes: extensivas e intensivas.
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Cubiertas verdes extensivas
Estas son de baja profundidad y están diseñadas para tener un mantenimiento mínimo. Suelen consistir en plantas resistentes a la sequía y de bajo crecimiento, como son las suculentas y las hierbas. Las cubiertas verdes extensivas pueden proporcionar beneficios como la reducción de la escorrentía de agua de lluvia, la mejora de la calidad del aire y la protección de la membrana impermeable del techo.
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Cubiertas verdes intensivas
Son más profundas y permiten una mayor variedad de plantas, incluidos arbustos, árboles pequeños e incluso jardines. Estas cubiertas requieren un mayor mantenimiento y pueden proporcionar espacios de recreo y áreas verdes adicionales en entornos urbanos densos. También ofrecen beneficios similares a las extensivas, como la absorción de agua de lluvia y la mejora del aislamiento térmico.
Los beneficios de las cubiertas verdes son diversos, abarcando desde el ámbito medioambiental hasta el económico y social:
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Mitigación del calor urbano:
Ayudan a reducir el efecto de isla de calor urbano, en el cual las áreas urbanas tienden a ser más cálidas que las áreas rurales circundantes (esto es debido a la absorción de calor por parte de las superficies pavimentadas y por los edificios).
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Mejora de la calidad del aire:
Las plantas en las cubiertas verdes ayudan a filtrar el aire al absorber dióxido de carbono y liberar oxígeno, así como a atrapar partículas de polvo y contaminantes atmosféricos.
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Gestión del agua:
Reducen la escorrentía de agua de lluvia al absorber parte del agua, lo que ayuda a prevenir inundaciones y alivia la carga en los sistemas de drenaje.
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Aislamiento térmico:
Proporcionan aislamiento adicional, ayudando a reducir la demanda de energía para la calefacción y refrigeración de los edificios.
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Biodiversidad y hábitat:
Pueden servir como hábitats para insectos, aves y otras especies, aumentando la biodiversidad en entornos urbanos.
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Estética y bienestar:
Crean espacios verdes y atractivos visualmente, lo que puede mejorar el bienestar de los residentes urbanos al proporcionar lugares de descanso y recreo.
Las cubiertas verdes son una solución sostenible y versátil que aborda varios desafíos urbanos, al tiempo que contribuye positivamente al entorno urbano y al medio ambiente en general.
El Ayuntamiento de Barcelona, a través de su ‘Área de Ecología, Urbanismo y Movilidad’, impulsa actuaciones para activar azoteas, cubiertas y patios de luces en edificios existentes y de nueva construcción para obtener el máximo rendimiento social, ambiental y energético, colaborando para transformarlas en cubiertas verdes.
Finques Chicote, como administrador de fincas colegiado, ayuda a las comunidades de propietarios que administra a dar el paso hacia las cubiertas verdes si así lo desean.