Uno de los principales problemas que afectan a los pisos y locales dentro de una comunidad de propietarios son las humedades y las goteras.
Cuando un piso o local se ve afectado por este problema, el origen puede ser de conducciones de agua comunes o privativas.
Es muy importante determinar siempre cual es dicho origen, porque en función de cual sea el mismo corresponderá o no a la comunidad de propietarios su solución.
A veces es muy evidente, pero otras no lo son tanto, en cuyo caso, lo correcto es primero dar parte al seguro comunitario para que los peritos determinen el origen exacto del siniestro.
En el supuesto que indiquen que el origen es privativo, el propietario del departamento afectado deberá comunicarlo al propietario del departamento superior a fin de que proceda a su solución, ya sea por vía de su seguro privado o por vía de un fontanero a su cargo.
Lo más habitual es que el propietario del departamento causante canalice la resolución a través de su seguro privado quien contactará con el propietario del departamento afectado para ello.
Hasta aquí, este es el proceso normal de resolución si todo va bien.
Los problemas surgen cuando el propietario del departamento causante hace caso omiso y no gestiona la resolución del problema del departamento que tiene humedades o, mucho peor, goteras.
Los motivos pueden ser diversos. Desde que el propietario del departamento causante no tenga seguro privativo hasta que no haga nada por pura desidia, ya que el problema lo tiene otro.
Si se produce esta desagradable situación y el propietario del departamento causante ignora los requerimientos, el propietario del departamento afectado tendrá que cursar parte a su seguro privado para que proceda a reclamar al propietario del departamento superior, aparte de comunicarlo al administrador de fincas para que interceda y haga recapacitar al propietario causante de su obligación para resolver el siniestro.
Si el propietario causante persistiera en su negligente actitud, poco puede hacer en este caso el administrador de fincas ya que se trata de un problema privativo entre dos departamentos, algo similar al problema de ruidos.
En esta situación, quien tiene más fuerza es la cobertura de defensa jurídica del seguro privativo del propietario afectado quien deberá reclamar daños y perjuicios al causante.
Como indicábamos al principio, lo normal es que este tipo de siniestros causados por conducciones de agua privativas se resuelvan sin problema alguno, pero es posible que se presenten situaciones negativas por inoperancia del propietario causante.
No obstante, al final ya sea de forma amistosa o no, el siniestro se tiene que resolver, aunque, es evidente que para el propietario afectado es mucho mejor la vía amistosa por ser más rápida.
Todos los retrasos y demoras se traducirán en un incremento de daños y molestias para el perjudicado.
En Finques Chicote gestionamos cada día numerosas incidencias por problemas de humedades y goteras que afectan a los departamentos de nuestras comunidades, y en la mayoría de los casos, el origen suele ser de conducciones comunitarias.