Cooperativas eléctricas, ¿la solución del mercado eléctrico?
En 2009 se liberalizó el mercado eléctrico en España, lo cual dió pie a la creación de nuevas empresas destinadas a la gestión de los contratos con los clientes.
Dentro de estas empresas, llamadas comercializadoras, se han puesto de moda las cooperativas eléctricas, empresas que ya existían desde hace muchos años, pero que han ganado adeptos con la gran subida de precios que se ha dado en España en los últimos años.
¿Qué es una cooperativa eléctrica?
En este tipo de empresas, los clientes se convierten, también, en dueños. Mediante unas cuotas iniciales que pueden variar, puedes entrar en la cooperativa y contratar la electricidad a través de ella.
Las decisiones que haya que tomar en la empresa, entre ellas las diferentes tarifas, se votan entre todos los socios.
Si bien la gente cree que la mejor ventaja de este tipo de compañías son los precios, lo cierto es que impulsan y utilizan una energía totalmente renovable.
Es cierto que su proporción en el mercado eléctrico actual es mínimo, pero la gran subida que ha experimentado la electricidad en España y el cambio de tarifas que se ha producido en 2020, hacen que cada vez más gente prefiera este tipo de cooperativas.
La Unión Nacional de Cooperativas de Consumidores y Usuarios de Energías Renovables (UNCCUER) afirma que los contratos con cooperativas no superan el uno por ciento del total de contratos eléctricos.
¿Cómo operan este tipo de compañías eléctricas?
Si bien hasta ahora las comercializadoras eléctricas sólo comercian con la electricidad, en las cooperativas también se produce, usando fuentes de energía renovables.
El transporte y la distribución siguen en manos de Red Eléctrica y de AELEC, a través de las distribuidoras actuales como Endesa, Iberdrola, Naturgy, Repsol y EDP.
Estas compañías se seguirán encargando de aspectos como el mantenimiento de la red de distribución eléctrica y gestiones individuales como dar de alta la luz o instalar acometidas.
La energía renovable de las cooperativas eléctricas
La forma de trabajar de este tipo de compañías consiste en la garantía de que si comercializan con cierta cantidad de electricidad, las fuentes de energía renovable han producido esa misma cantidad de energía.
Esto se consigue a través de certificados de garantías de origen de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). Un productor de energía tiene un plazo fijo para certificar que su energía es de origen renovable y poseer dicho certificado que luego dan a las comercializadoras para certificar que la energía que comercializan es renovable.
El cambio de modelo como objetivo
En la actualidad, la cantidad de electricidad de origen renovable es muy superior a la demandada. El objetivo de las cooperativas es cambiar el modelo energético a través de una mayor demanda de este tipo de energía.
Uno de los motivos de conseguir este cambio es incluir al ciudadano en esta lucha. Mediante una participación en la compañía, se impulsa el uso de energía renovable que, más allá de suponer un ahorro para el socio, también le reportará beneficios y ganancias económicas.
Si te ha gustado esta publicación de «Cooperativas eléctricas, ¿la solución del mercado eléctrico?», también te puede interesar